“A los ocho días…” (Lc 2,16-21) (octava de Navidad)

“A los ocho días…” (Lc 2,16-21) (octava de Navidad)



Pasados los ocho días del nacimiento del Niño, fue celebrado el rito del al circuncisión, mediante el cual él entró a formar parte del pueblo de elegido (cf. Gn 17,2-17)y se le impuso el nombre de “Jesús”, que quiere decir: “Dios salva”. Con el texto evangélico de esta fiesta que cierra la Octava de Navidad, celebramos además el título maravilloso de María “Madre de Dios”, título proclamado solemnemente en el 431 por el concilio de Éfeso, donde se sitúa la realidad del Niño como hijo verdadero de su madre terrena. Y a esta Madre, Lucas le atribuye la acción profunda de “meditar” cosas que le van pasando en relación con su Hijo. “Meditar” en realidad, significa literalmente en el texto original griego “poner juntos”: es la misma realidad concreta y un significado superior, una imagen inmediata y un valor espiritual, un dato de la experiencia y valor más íntimo que puede tocar las propias entrañas. María entones, “ponte juntos” como Madre, la Anunciación de su Hijo, el suceso de José que la recibió en su casa, la visita a Isabel su prima, el camino hacia Belén, su alumbramiento, la visita de los pastores…. todo al meditarlo pasa de lo simbólico normal al plano profundo de lo espiritual: superior y glorioso. Con su clara capacidad de asombro, ve a Dios en todas estas cosas, que lee como parte de ese proyecto divino que el Ángel le había ya anunciado. Ella como mujer y ahora como madre, llena de la gracia de Dios, se convierte en la “sabia” por excelencia que penetra en los secretos de los acontecimientos humanos intuyendo en ellos el designio admirable de salvación que Dios está realizando. Y ¿qué decir cuando le pone el nombre de Jesús”? ella seguramente ve no sólo el hecho de darle un nombre para identificarlo entre todos los hijos de Israel, sino para darle lo que le pidió el ángel y la misión que Él ya grande deberá consumar en su vida adulta. Para el evangelista sólo María adopta la postura del verdadero discípulo creyente, porque ella sabe guardar con sencillez lo que escucha y medita con fe lo que ve, para ponerlo todo en su corazón y transformar en plegaria la salvación que Dios le ofrece.

“A los ocho días…” (Lc 2,16-21) (octava de Navidad)

“María…. lo puso en un pesebre.” (Día de Navidad)

Con el relato del nacimiento del Hijo de Dios, narrado por Lucas que se leerá en la misa del “gallo”, nos encontramos con dos elementos opuestos y extraordinarios, la pobreza extrema con la que nace el Hijo de Dios acompañada por la manifestación gozosa del mismo cielo colmado de luz, de legiones de ángeles y coros celestiales. Y, es Belén, la ciudad del Rey David, la que sitúa el espacio físico, humano y espiritual del acontecimiento. Al Rey del cielo, a su llegada solo le acompaña su familia terrena, compuesta por esa pareja de esposos justos y pobres, y mas tarde unos simples pastores, sencillos y llenos de sincera admiración. Con su nacimiento narrado en sólo 14 versículos, Lucas nos señala que el Mesías que acaba de nacer, no tiene título, dignidad, ni poder y mucho menos dinero. En el Niño de Belén, los fieles reconocen al Señor del cielo y de la tierra, al que viene a salvarnos en el misterio de su Pascua. Es interesante notar que el arte oriental ha representado esta dimensión “pascual” solemne de la navidad de manera muy sugestiva: el icono ruso de la natividad perteneciente a la escuela Novgorod (siglo XV) representa al Niño envuelto en pañales y colocado en una pesebrera que tiene la forma del sepulcro de la Resurrección. Nace en verdad para salvarnos. Por eso los ángeles en su himno dan “Gloria a Dios” y suplican la “Paz” a los hombres. De este acto de total y plena bondad del propio Dios nace la paz, el Shalom del Antiguo Testamento. Es un concepto denso y ramificado, significa: bienestar, prosperidad, fortuna, totalidad, suficiencia, desarrollo pleno, satisfacción, serenidad, alegría, acontecimiento, tranquilidad. Es el ser total que con la Shalom divina, se ve penetrada por lo bello de la vida, por el bien y lo justo de todas las cosas. De allí que el saludo del pueblo de la antigua y nueva alianza se salude siempre con la “paz”. Que esta paz que tanto hace falta en nuestros días, se hoy un don que recibir y que ofrecer a los demás. Es un hermoso día inaugurado con esta noche santa, para volver a reconocernos como esos hombres y mujeres de “buena voluntad”, es decir, con los que Dios cuenta para construir un Reino hecho de amor y de paz, valores fundamentales para que la felicidad llegue a todos. Queridos lectores, tengan una feliz y santa Navidad.

Canto Mes de la Biblia 2023

Canto Mes de la Biblia 2023

Palabra VIVA (Acordes)

G9                            C9                 G9    C9

Somos un pueblo cuya historia va

G9             C9

Siguiendo las huellaaaaaas, G9      C9

de quien ya vivió

C.            D.                  C.                       D

Elegidos servidores de una palabra de verdad

C.                              D.    D7.       G       C9

De un mensaje que anuncia libertad

G9                            C9                   G9    C9

Somos profetas de esperanza y fe

G9          C9

Llevamos La Paz

C.                             D

Semilla del Reino  que está escondido

C.                           D.

Pero que espera germinar

C.                         D.    D7.       G El desafío es hacerlo realidad

Em.                                  D

Nos llevaremos las fuerzas

Am7.                 Bm7

Las  riquezas de la Palabra

C.                 D

En nuestros corazones

Em.                   B                 C        C9   G/b

Nuestra vida estará unida a Cristo

Am7.               D Para ser como El G

Palabra viva

Em.                      Bm7.              Am7   Bm7

En medio de un mundo confundi….do

C                   D   C                           Bm7                   Am7

El Evangelio va dando frutos que hacen brillar

D              G

Un mundo nuevo

Nos llevaremos las fuerzas…

Nuestros pasos continúan hoy Abriendo caminoooos Sembrando el amor

Somos relevos de esta historia

Realizando la misión

Entre luchas, cansancio e ilusión

Palabra VIVA

Somos un pueblo cuya historia va…
Siguiendo las huellas de quien ya vivió.
Elegidos servidores de una Palabra de VERDAD.
De un mensaje que anuncia libertad.

Somos profetas de esperanza y de Él…
Llevamos la paz
Semillas del Reino que está escondido
Pero que espera germinar
El desafío es hacerlo realidad.

Nos llevaremos las fuerzas
Las riquezas de la Palabra
En nuestros corazones…
Nuestra vida estará unida a Cristo
Para ser como Él
PALABRA VIVA.

En medio de un mundo…. confundido
El Evangelio va dando… frutos que hacen brillar…
un mundo nuevo.

Nuestros pasos continúan hoy… abriendo caminos….
Sembrando el amor.
Somos herederos de esta historia
Realizando la misión
entre luchas- cansancios de ilusión.

Video- Homilía parábola del  Sembrador

Video- Homilía parábola del Sembrador

Mensaje del Evangelio

Evangelio según San Mateo 13,1-23

1 Aquel día, Jesús salió de la casa y se sentó a orillas del mar.
2 Una gran multitud se reunió junto a él, de manera que debió subir a una barca y sentarse en ella, mientras la multitud permanecía en la costa.
3 Entonces él les habló extensamente por medio de parábolas. Les decía: “El sembrador salió a sembrar.
4 Al esparcir las semillas, algunas cayeron al borde del camino y los pájaros las comieron.
5 Otras cayeron en terreno pedregoso, donde no había mucha tierra, y brotaron en seguida, porque la tierra era poco profunda;
6 pero cuando salió el sol, se quemaron y, por falta de raíz, se secaron.
7 Otras cayeron entre espinas, y estas, al crecer, las ahogaron.
8 Otras cayeron en tierra buena y dieron fruto: unas cien, otras sesenta, otras treinta.
9 ¡El que tenga oídos, que oiga!”.
10 Los discípulos se acercaron y le dijeron: “¿Por qué les hablas por medio de parábolas?”.
11 El les respondió: “A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del Reino de los Cielos, pero a ellos no.
12 Porque a quien tiene, se le dará más todavía y tendrá en abundancia, pero al que no tiene, se le quitará aun lo que tiene.
13 Por eso les hablo por medio de parábolas: porque miran y no ven, oyen y no escuchan ni entienden.
14 Y así se cumple en ellos la profecía de Isaías, que dice: Por más que oigan, no comprenderán, por más que vean, no conocerán,
15 Porque el corazón de este pueblo se ha endurecido, tienen tapados sus oídos y han cerrado sus ojos, para que sus ojos no vean, y sus oídos no oigan, y su corazón no comprenda, y no se conviertan, y yo no los cure.
16 Felices, en cambio, los ojos de ustedes, porque ven; felices sus oídos, porque oyen.
17 Les aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que ustedes ven y no lo vieron; oír lo que ustedes oyen, y no lo oyeron.”
18 Escuchen, entonces, lo que significa la parábola del sembrador.
19 Cuando alguien oye la Palabra del Reino y no la comprende, viene el Maligno y arrebata lo que había sido sembrado en su corazón: este es el que recibió la semilla al borde del camino.
20 El que la recibe en terreno pedregoso es el hombre que, al escuchar la Palabra, la acepta en seguida con alegría,
21 pero no la deja echar raíces, porque es inconstante: en cuanto sobreviene una tribulación o una persecución a causa de la Palabra, inmediatamente sucumbe.
22 El que recibe la semilla entre espinas es el hombre que escucha la Palabra, pero las preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas la ahogan, y no puede dar fruto.
23 Y el que la recibe en tierra fértil es el hombre que escucha la Palabra y la comprende. Este produce fruto, ya sea cien, ya sesenta, ya treinta por uno”.


Extraído de la Biblia: Libro del Pueblo de Dios.

Video- Homilía parábola del  Sembrador

Hallan en el Vaticano un fragmento de una antigua traducción del Nuevo Testamento

La Academia de Ciencias de Austria (ÖAW) ha anunciado recientemente el descubrimiento de un fragmento perdido de la Biblia del Nuevo Testamento, que ofrece una perspectiva única y novedosa a los primeros estadios de los Evangelios. El descubrimiento se trata de un pequeño fragmento del manuscrito de la traducción siríaca, escrito en el siglo III y copiado en el siglo VI. El descubrimiento es uno de los testimonios textuales más antiguos de los Evangelios y un elemento crucial de la historia del Nuevo Testamento.

Descubrimiento del manuscrito

El fragmento del manuscrito ha sido descubierto por el medievalista Grigory Kessel durante el proyecto «Sinai Palimpsests». El manuscrito en cuestión se encuentra en el Monasterio de Santa Catalina en el Monte Sinaí. Se trata de un palimpsesto, un manuscrito que ha sido reutilizado borrando y escribiendo encima varias veces. El fragmento ha sido hecho legible de nuevo gracias a la tecnología de fotografía ultravioleta.

Kessel ha identificado el pequeño fragmento del manuscrito como la tercera capa de texto, o doble palimpsesto, del manuscrito original en la Biblioteca del Vaticano. Se cree que es el cuarto testimonio textual y proporciona una ventana única a los primeros estadios de la historia de la transmisión textual de los Evangelios.

La tecnología utilizada


La tecnología de fotografía ultravioleta es una técnica que se utiliza para revelar detalles ocultos en manuscritos antiguos y otros documentos que han sido escritos sobre o borrados y reescritos varias veces. Esta técnica se basa en la propiedad de que las tintas antiguas y otros materiales que se han utilizado para escribir a menudo reflejan o absorben la luz ultravioleta de manera diferente que el pergamino o el papel en el que se escribió.

Para hacer una fotografía ultravioleta, se utiliza una cámara que está equipada con un filtro de corte de infrarrojos y un filtro de paso de ultravioleta. El filtro de paso de ultravioleta bloquea la luz visible y permite que solo la luz ultravioleta entre en la cámara. El filtro de corte de infrarrojos bloquea la luz infrarroja que puede interferir con la imagen.

Una vez que se ha tomado la fotografía ultravioleta, se procesa digitalmente para revelar los detalles ocultos. Esto se puede hacer mediante el uso de software especializado que puede aumentar el contraste y ajustar la exposición para resaltar los detalles que son difíciles de ver a simple vista.

La tecnología de fotografía ultravioleta se ha utilizado para descubrir y revelar muchos manuscritos antiguos importantes, incluyendo fragmentos del Mar Muerto y otros documentos bíblicos antiguos. Esta técnica ha permitido a los historiadores y a otros expertos en manuscritos estudiar y analizar estos documentos con mayor detalle, lo que ha llevado a nuevos descubrimientos y una mayor comprensión de la historia y la cultura de las sociedades antiguas.

En el caso del fragmento perdido de la Biblia del Nuevo Testamento, la fotografía ultravioleta fue esencial para hacer legible el texto del palimpsesto, que había sido borrado y escrito encima varias veces. Sin esta tecnología, el texto original habría permanecido oculto e inaccesible, lo que significa que este importante descubrimiento nunca habría sido posible.

El valor del descubrimiento


El descubrimiento es de gran importancia porque es uno de los testimonios textuales más antiguos de los Evangelios, proporcionando una ventana única a los primeros estadios de la transmisión textual de los Evangelios. La traducción siríaca es una de las primeras traducciones de los textos bíblicos, y el descubrimiento es uno de los testimonios más antiguos de la versión siríaca de los Evangelios.

El fragmento del manuscrito contiene una parte de Mateo, capítulo 12, verso 1. La traducción siríaca dice que los discípulos de Jesús «comenzaron a recoger las cabezas del grano, frotarlas en sus manos y comerlas«. Este pasaje ofrece una perspectiva única sobre la forma en que se han traducido los textos bíblicos a lo largo de los siglos y cómo las diferencias en la traducción pueden afectar a la interpretación de los textos.

El descubrimiento de este fragmento perdido de la Biblia del Nuevo Testamento es un importante logro histórico. La traducción siríaca es una de las primeras traducciones de los textos bíblicos y el descubrimiento es uno de los testimonios más antiguos de la versión siríaca de los Evangelios.

La traducción siríaca fue utilizada por los primeros cristianos en Siria y en todo el Oriente Medio, y el descubrimiento es un recordatorio de la larga y rica historia del cristianismo en estas regiones.